martes, 9 de octubre de 2007

HUELLAS 3.1



Todo comienza y termina en un momento como éste, cualquiera, que me detengo a repasar mis pasos. De pronto miro alrededor y pareciera como si estuviera todo en calma, estático, diferente a la última vez que dejé de mirar para apresurarme a donde debía llegar. Entonces todo alrededor se movía incesante y caótico, como si tuviera que salir huyendo de ese tiempo y de ese espacio, antes de que se destruyera por completo… y me destruyera también.

Pero, ¿cómo? ¿Por qué ahora no hay ese caos? ¿Dónde quedó la emergencia de sobrevivir al presente? Más que volverse en pasado, ahora parece eterno y mi existencia se prolonga con él. Pero además tengo un poder que no existía hace un instante: hoy que estoy en calma, tengo el vivo recuerdo del caos que me trajo hasta aquí. Vuelvo la mirada hacia los pasos que dí. Ahí están. Puedo ver las huellas que recuerdan que estuve ahí. Hay tantos caminos alrededor, y muchos de ellos conducen precisamente a donde me encuentro hoy. El derrotero es lo que cambia, lo que me cambia. De haber tomado uno distinto, hoy no estaría suspendida en esta efímera eternidad.

¿Cuántos espacios en caos? ¿Qué momento me depara el instante inmediato al que respiro justo ahora? Ya siento que me jala. El tiempo se estira por última vez, y poco a poco muere la eternidad para arrojarme a otro camino hacia el caos. ¿Y mis huellas? Mis huellas me siguen. No importa cuán rápido o despacio me vaya de aquí. Siempre que vuelvo la mirada, repaso los derroteros y las efímeras eternidades, en el caos y en la calma, en el presente que ya no lo es, en el momento que respiré ayer, ahí están. Ahí seguirán.


Erika Palmeros


2 comentarios:

Graciela Bello dijo...

Muy interesante la idea de las huellas.
Si les interesan las artes plásticas, pueden visitar el site:
http://fineartamerica.com
Saludos!

Anónimo dijo...

Muy interesante las tonterías que una tras otra y casi con la apariencia de bonitas dejas dichas. Pareciera que eres hasta buena persona. Leyendo esto cualquiera podría interpretar que lo eres y nada más lejos de la realidad.